Cuando se nos ha ocurrido una nueva estrategia o una idea para fortalecer las ya iniciadas, un proyecto de viabilidad nos permitirá evaluar minuciosamente las posibilidades económicas que tenemos para invertir en esa ejecución, y estudiar el ámbito de la producción y comercialización. No obstante, este proyecto apunta fuertemente a conseguir las mejores inversiones financieras y asociados para el mejor desarrollo de nuestros productos y compañía. Para lograrlo se deben tener en cuenta otros aspectos:

1. Presentación del promotor: una de las ventajas de un proyecto de viabilidad es que permite dar una presentación formal del emprendedor responsable, donde se pueden ver los datos tales como nombre completo, número de identidad, domicilios, teléfonos, etc. entre cualquier dato de referencia que se pueda requerir.

2. La imagen que se apunta: en un proyecto de viabilidad siempre está descripto la reflexión sobre la imagen que queremos mostrar de nuestra compañía. Con qué valores queremos llegar a nuestros clientes, y qué queremos sembrar en ellos. Además, se describirá a que sector de la sociedad se dirige, sexo, edad, nivel económico, etc.

3. Necesidades y fuentes de financiación: aquí es efectivo tener un proyecto de viabilidad porque todas las ideas y estrategias para llevarse a cabo, requerirán de la disposición de cierto capital. Para ello se necesita alguien que lo financie. Y es donde necesitamos que esa cantidad esté precisamente definida. Así lo requerirán las posibles fuentes de financiación, al igual que requerirán detalladamente la posibilidad de efectividad de lo que se llevará a cabo.

4. La oferta: en un plan de viabilidad podremos describir los productos o servicios que ofertamos. Del mismo modo que detallamos como será nuestra atención al cliente, cuáles serán nuestros valores con respecto a ellos, cómo será la calidad del servicio que ofreceremos y qué asesoramiento tendrán las personas que lo comercialicen. Qué tipo de innovación les brindaremos, y hasta estimar qué precios tendrán los productos.

5. Análisis de compra: un proyecto de viabilidad lleva el comprobante, de quienes hemos elegido como proveedores. Detallará en él que valores se han tenido en cuenta de estas empresas con las que hemos decidido comercializar y por qué. También se evaluará la cantidad de precios que nos ofrece, y la calidad del producto. Se describirán que
posibilidades de pago hay, y el tiempo que tardará el producto en llegar a nuestra compañía.

6. La ubicación: este factor suelen requerirlo muchos inversionistas, y siempre se detalla en un plan de viabilidad, debido a que el lugar donde estará ubicada la compañía o el negocio suele resultar estratega y exitoso. Se describe cual será entorno en el que estará ubicado, si será vistoso, si estará entre viviendas o en un centro comercial.


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Departamento Fiscal

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